Esta elegante silueta pertenece al más abundante de los buitres europeos, el buitre leonado. En España tenemos la subespecie nominal Gyps fulvus fulvus, existe otra subespecie, Gyps fulvus fulvescents, distribuida solo por la zona de Pakistán y Nepal. En nuestro país se reproduce el 98% de la población europea de este buitre, es nuestra responsabilidad la conservación de esta especie tan emblemática.
Vida comunitaria, un animal social
El buitre leonado vive en colonias de decenas a centenares de individuos unidos por estrechos lazos sociales y etológicos. Estas colonias las solemos encontrar en acantilados, en especial los que poseen cavidades y salientes donde albergar el nido. Los principales elementos de la colonia son los puntos de nidificación y los reposaderos, que es donde se producen interacciones sociales como el acicalamiento de un individuo a otro y el estrechamiento de los lazos de pareja.
Los buitres leonados son monógamos y se emparejan de por vida. No obstante, como en todas las reglas, siempre hay alguna excepción, es decir, algún caso de apareamiento extrapareja.
Los buitres adultos son muy sedentarios, mientras que los jóvenes pueden dispersarse grandes distancias o migrar siguiendo las rutas habituales de las aves planeadoreas.